No, es imprescindible estar dado de alta con el pago de la cuota al corriente.
Porque en su origen, este proyecto está pensado en tres fases. La primera de una duración de unos seis meses, será de consultas online para probar el grado de adhesión de la sociedad al proyecto y la satisfacción de los miembros. Si hay buen resultado, se pasará a una segunda fase donde a la asistencia online se pueda añadir consultas ambulatorias presenciales en los sitios donde haya suficientes miembros para ello. De igual modo, si la respuesta social es buena, se prevé pasar a una tercera fase que incluya dependencias sanitarias donde pueda atenderse a los pacientes que requieran hospitalización para pruebas o tratamientos médicos o quirúrgicos.
En la primera fase esto no está previsto que haya consulta presencial, si bien una vez puestos en contacto médico y paciente pueden acordarla si ambos están de acuerdo en el lugar y condiciones. No obstante, muchas consultas médicas no requieren explorar al paciente (segundas opiniones o aclarar informes médicos, dudas, recetas, ajuste de tratamientos, información de otras posibilidades,,..)
Efectivamente, la consulta médica en esta primera fase se ha establecido en 30 euros fijos por una llamada de 15 minutos máximo.
Aunque exista tendencia a alargar la consulta, tanto el paciente como el médico deben intentar ceñirse a un máximo de 15 minutos. Se ha establecido que una conversación de 15 minutos sirve para aclarar muchas dudas cuando se ponen por orden por parte del paciente y el médico es conciso y preciso en sus respuestas.
Para que eso no suceda, es conveniente no «apurar»: no se saca más provecho porque se agote hasta el último minuto. A veces una consulta queda perfectamente aclarada en 8 minutos. Se apela a la formalidad tanto del paciente como del médico para respetar este tiempo establecido por respeto también a los demás, ya que daría lugar a abusos o comparaciones molestas.
Tanto el paciente que desea ser atendido como el profesional que le atienda pueden estimar que así es. Sobre todo, en problemas de índole psicológica que tienen un carácter más delicado, es muy probable que el tiempo de una consulta de 15 minutos sea insuficiente. Si se estima oportuno, deberá solicitarse dos, tres, o las consultas que se crean necesarias. En cualquier caso y dado que el tipo de consulta puede ser muy diversa, el médico orientará si es necesario o conveniente o propondrá alternativas para que sea visto presencialmente, por él u otro colega. El paciente debe acordar con el médico en este caso las condiciones especiales que su atención requiere.
Es algo que puede suceder, como en cualquier interacción profesional. EL médico no puede garantizar resultados, debe esmerarse en la atención, pero no todo tiene el remedio que el paciente desearía. Atendiendo a esas limitaciones, al final de la consulta el paciente recibirá un cuestionario de 4 preguntas para que puntúe de 1 a 10 la calidad de la atención recibida. Aunque no es obligatorio responderlo, las respuestas pueden ayudar a otros miembros a conocer cuál es el profesional mejor valorado por quienes han acudido a sus servicios.
Leer lo que escribe cada uno es laborioso. Además, puede ser fuente de interpretaciones injustas, con valoraciones exageradas tanto por exceso como por defecto. No obstante, si algún miembro considera que la advertencia o consideración que desea hacer es importante para el correcto funcionamiento de la plataforma, si considera que existe algún tipo de abuso, habrá un buzón de correo al cual puede enviar ese comentario y será respondido.
De inicio se ha establecido así para el arranque del proyecto. Estar colegiado ya supone un filtro de que se posee titulación para ejercer. Evidentemente eso no significa que el ejercicio que haga cada miembro profesional sea del agrado de los demás. Por eso se insiste en que el médico es autónomo en su ejercicio y responsable en sus acciones. Es el único responsable. Se le pide que se adecúe a la lex artis ad hoc con respeto exquisito al Código de Deontología Médica. Y en ningún caso la plataforma se responsabiliza de su proceder.
No tiene nada que ver con ello. Los servicios que se reciben en esta plataforma no están cubiertos por ninguna compañía de seguros médicos. Aunque no son incompatibles, son complementarios.
Por supuesto, de común acuerdo, ambos pueden decidir hacer seguimiento o tratamiento donde consideren oportuno. No existe ningún impedimento por parte de la plataforma, ni beneficio ni responsabilidad por ello.
Efectivamente, para eso figuran, para ofrecer sus servicios. Se entiende por lógica que uno acudirá a los servicios del médico que por especialidad, proximidad o conocimiento más sugieran que puede resolver la duda o problema del paciente. Pero también está dentro de los derechos del médico aceptar o no la consulta, si no se considera adecuado, apto o habilitado para resolverla con éxito o si cree que otro colega es más idóneo para ello, en cuyo caso comunicará al paciente esa decisión y esa consulta, al no realizarse, no se cobra al paciente ni se abona al médico.
Por supuesto, al tratarse de un proyecto dinámico, hay que ir corriendo las dificultades de funcionamiento o problemas que existan y por ello hay un correo electrónico donde se atienden este tipo de consultas.
Se genera automáticamente una factura tras la consulta, siempre que lo desee. Se pedirá al solicitante los datos oportunos para generarla.
Eso es algo que tiene que consultarlo con su compañía de seguros.